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martes, 7 de septiembre de 2010

¿Qué es el Counseling?...

El counseling es una actividad de asesoramiento, acompañamiento, consejo y orientación a toda persona o grupo humano que estén atravesando situaciones de crisis o conflictos. La ayuda que brinda la Sociedad Peruana de Relaciones Humanas es de prevención, cambio y desarrollo personal buscando el restablecimiento del equilibrio personal y del bienestar emocional de aquellos que constituyen la comunidad donde residen.

Esta disciplina surgió hace más de 60 años y se viene desarrollando con bastante éxito en nuestro medio, promoviendo la adquisición y fortalecimiento de una Actitud Mental Positiva en la persona, disciplina inspirada y desarrollada por Carl Roger.

Carl Roger plantea que todo ser humano posee una gran capacidad para hallar por si mismo todos los recursos que necesita para edificarse un estilo de vida conveniente. Pero cuando se desorienta en su afán de crecimiento y desarrollo requiere el apoyo de un especialista que sea capaz de ayudarlo a restablecer aquellos vínculos que se hayan debilitado o se encuentren amenazados.

Este profesional, es el counselor quien, gracias a su formación en psicología, antropología y sociología, puede facilitarle la tarea de crear y re-crear las condiciones necesarias para que el cliente continúe con su crecimiento y desarrollo personal.

El counselor debe poseer buena presencia, empatía y autenticidad, elementos que le permitan ser modelo de vida y ejemplo a seguir. El counselor debe percibirse como una persona que despierte simpatía y en quien se pueda confiar, ya que este lo recibirá tal cual es usted. Lo escuchará, comprenderá y aceptará sin calificarlo de modo alguno, de forma que usted pueda expresarle sus vivencias, pensamientos o sentimientos y descargue sus tensiones y emociones encontrando el alivio que necesita.

El counselor tomará sus datos personales en una hoja la cual será registrada con el motivo de la consulta y/o las necesidades que necesita atender para fortalecerse internamente. Lo escuchará detenidamente para luego analizar la situación, elaborar un plan estratégico con las técnicas y herramientas terapéuticas necesarias para ayudarlo a alcanzar su bienestar emocional y espiritual.

En caso de detectar alguna patología lo derivará al especialista del área médica o psiquiátrica que requiera. Los counselor trabajan con equipos interdisciplinarios para tal fin.

El counselor lo ayudará en la identificación de sus fortalezas y debilidades, facilitará su proceso de cambio y toma de decisiones, asistiéndolo contínuamente durante el mismo.

El Counseling es el lugar donde se efectúan las consultas. Es un lugar privado donde puede sentirse cómodo y a salvo. En algunas circunstancias, las entrevistas pueden llevarse a cabo fuera del consultorio, en cafeterías o en el domicilio del consultante si las condiciones lo permiten.

La actividad se inicia analizando al cliente con el fin de identificar los procesos de pensamiento, sentimientos o acciones que puedan estar afectando su estabilidad para luego realizar un balance determinante de los hábitos que deben ser modificados.

Para este efecto, el counselor elaborará un plan estratégico donde se priorizarán los objetivos que permitan la erradicación de aquellos comportamientos indeseables y fomentar la adquisición de conductas favorables que le permitan ajustarse socialmente.

El asesor busca en todo momento ayudar al cliente a entenderse a sí mismo, a identificar cuales son los razonamientos subjetivos que le resultan contraproducentes, le enseña a examinarse a sí mismo para identificar de manera más rápida aquellas actitudes negativas o hábitos de conducta paralizantes y explica como se construyen psicológicamente, se escudan y se conservan en el inconsciente.

Luego, el cliente deberá analizar las alternativas de cambio de pensamiento, sentimiento y acción que el asesor le plantee para verificar si será capaz de concretizarlas. Aceptadas las propuestas, el cliente deberá ensayar, con la supervisión del counselor, las nuevas conductas que posteriormente ejecutará por su cuenta, fuera del ámbito de la consulta y cuyo resultado deberá informar por teléfono o en una entrevista posterior.

Las nuevas ideas y sentimientos que experimente el cliente se analizarán para establecer si constituyen un verdadero progreso o lo contrario. Estos informes se llevarán a cabo durante todo el período de asesoramiento hasta que el individuo haya alcanzado un cambio notorio y positivo en lo mental, emocional y físico. Se deberá observar con detenimiento si el cliente ha incorporado las nuevas ideas y hábitos que le impidan retroceder al motivo que lo llevó a solicitar la intervención.

El cliente deberá entender que es necesaria su participación activa en la incorporación de nuevas formas de pensar, sentir y actuar, y que es muy probable que toquen algunas fibras íntimas resultándole penoso y hasta doloroso de aceptar. Habrá momentos de desazón y angustia donde, en consecuencia, querrá resistirse o eludir la tarea. No debe olvidar la estrecha relación que existe entre pensamiento, sentimiento y conducta, por lo que, todo cambio deberá empezar por cambiar su forma de pensar.

El asesoramiento es un proceso de adiestramiento en el duro camino del despertar de la conciencia tanto para el consultante como para el consultor quienes, en su esfuerzo mancomunado de hallar una salida de la situación envolvente en la que se halla el cliente, aprenderán juntos y compartirán experiencias muy valiosas para su mutuo crecimiento personal.

La duración de la relación terapéutica es relativa puesto que toma tiempo desaprender lo aprendido y comprender lo sucedido. Por este motivo, ambos deberán establecer un vínculo amical que les permita conocerse y congeniar como lo harían dos grandes amigos. El cliente deberá permitir gradualmente que el asesor ingrese en su mundo, en su realidad de ser-espacio-tiempo con el objetivo de entender sus motivaciones y darles un sentido.

El counselor buscará atentamente los medios que le posibiliten a su cliente crecer y estructurarse con mayor seguridad y así, mejorar su calidad y estilo de vida en relación consigo mismo y con los seres humanos con quienes se relacione.

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